¿"Poetas a orillas de la vida"? ¿Por qué?
Eso mismo nos preguntábamos nosotros, hasta entender el significado del mismo.
La vida es como el océano: Inmenso, infinito, necesario... y mortal. Es divertido nadar en la profundidad de la vida, disfrutarla o compartirla. Pero siempre con cuidado; puedes hundirte en ella sin aviso alguno, acercando trágicamente tu reloj del tiempo al final mas próximo.
Ya sumergido en aquella inmensidad, siempre puedes encontrar alegres peces que simulan ser inofensivos y mas tarde ver su verdadero ser de crueles animales que persiguen el mismo objetivo de todo ser vivo; Sobrevivir. ¿Son tan diferentes estas criaturas de los tan infieles amigos que te mienten de por vida? No. Realmente son la misma persona, la misma que te engaña hablando de ti a tus espaldas día tras día... Machacando tu autoestima a mentiras que jamás serán verdad. Ahora reflexiona, ¿Estás seguro de preferir estas personas a los enemigos que ignoran tu presencia? Somos humanos, somos idiotas. Ninguno de nosotros se replanteará seriamente esto último. Nunca.
Intentas no ser similar a nadie. Ser especial. Nadas contracorriente y las olas rompen agua en tu rostro, iluminando tu gesto de ser valiente y haciendo ademan de ser alguien. Buscando tu propio ser. Pero tu mero intento de no parecerte al resto y ser diferente no da los esperados resultados, pues para el mundo solo serás "Otro raro más" que lucha por buscar sus propios límites y adversidades para enfrentarse a estas.
Para hacer poesía hay que pensar y preguntarse a uno mismo: "¿Qué es lo que en realidad siento?"
Recuerdo una noche haber acabado un precioso poema y a continuación de completar el título, romperlo con mis propias manos y tirarlo a una bolsa de basura maloliente. Hoy en día, me enorgullece haberlo hecho.
¿Sentía lo que escribía? No. Fue entonces cuando mi mente me hizo abrir los ojos y preguntarme: "Si yo no siento lo que escribo, ¿Cómo pretendo transmitírselo a los demás y hacer que lo sientan ellos?"
Expresar a través de un papel tus propios sentimientos no es difícil. Lo difícil es explicarlos sin nunca antes haberlos sentirlos. Tampoco es cuestión de escribir por aburrimiento o incluso por diversión. Se trata de sentirlo ahí en tu pecho, en tu corazón. Algo que te mata por dentro y te destruye por fuera, haciendo que retenerlo en tu interior sea un helado infierno que te arrastra hasta la orilla sin la mínima dificultad.
Esto mismo es lo que nos hace a nosotros ser cómo verdaderamente somos. Haciéndonos dos poetas a orillas de la vida, afrontando las dificultades de la misma, sin hundirte en los problemas de la inmensidad.
Poetas a orillas de los problemas.
Poetas a orillas de la vida.