jueves, 31 de diciembre de 2015

Joyeux année

Son las nueve menos cuarto. Día 31 de Diciembre. Y dentro de una hora seran las diez menos cuarto. Así, de una forma interminable. Quizá algunos no le den importancia a este hecho pero, cada segundo, minuto u hora que transcurre es un tiempo perdido o aprovechado. Una sonrisa, una lágrima, una amistad, una mirada enamorada... Cada instante de nuestra vida, es importante. Sea de tu gusto o no.  

En menos de cuatro horas entraremos en el año 2016. Pero, volteemos la mirada un instante; ¿Con qué momentos nos quedaremos de este año? 

Para comenzar, de una manera personal, se podría decir que nuestros afanes por escribir, (sobretodo poesía) comenzó este 2015, junto a la creación de este mismo blog. Muchos cambios han surgido tras la difusión del mismo; como ver de otra manera el mundo, pensar de otra forma, sentirse diferente, sentirse "raro", escribir no solo cuando profesores del colegio obligan a hacerlo como deberes, etc. Agradecer a todas aquellas personas que nos acompañaron desde la primera entrada y el primer verso que fue compuesto en aquel desgarrado y arrugado papel. Desde lo más profundo del corazón, de verdad: Gracias. 

Y mirando más allá, hacia el mundo... Descubriremos que hoy cientos de franceses no estarán presentes junto a amigos, familiares y conocidos. Y para ellos, será la primera vez que despidan el año sin su constancia. Recordemos aquel atentado de Noviembre, que se llevó muchas almas al cielo. 

No nos olvidemos de la palabra clave: Refugiados. Niños, mujeres, hombres, heridos... Todos huyen de su país buscando un futuro mejor. Pero desgaciadamente, no todos lo consiguen. 

Pero no solo han ocurrido hechos desafortunados. También descubrimos agua en marte, nos acercamos a plutón, se celebraron en diciembre las elecciones generales españolas... 

No se puede negar que 2015 ha sido un año con bastantes hazañas, tanto afortunadas como desafortunadas. Pero lo que queda evidente, es que en lo poco que nos queda a los humanos podemos afirmar que en nuestros pequeños corazones aun hay algo de esperanza. 

Así pues; solo queda recordar a los que nos han dejado, ver la otra parte de la moneda, disfrutar con la familia, sea de sangre o no lo sea y agadecer que si ahora mismo te encuentras leyendo esto, es porque estás vivo. 

Feliz 2016. 

miércoles, 30 de diciembre de 2015

Sweet dreams for Christmas days'

Tu alma ha sufrido mucho. Tu alma ha cambiado mucho. Y tú, lo has hecho con ella. 

Has sido desgarrada por innumerables cuchillos que a lo largo de tu paupérrima y pésima vida se presentaron en forma de alegres y cercanas personas. ¡Qué ironía!  Pero tú. Que solo quisiste una vida digna de vivir y ella misma se negó a quedarse contigo. Y tú. Te quedaste sola. Pero aquella mujer se quedó a tu lado. Incrédula... Ilusa... No debiste creerla. Ella fue la que se llevó a tus seres más queridos y la que se quedará contigo en tiempos futuros. Pero es evidente, te encontrabas sola. 

Durante tu vida has pasado miedo. El pasado te dominó, perdiste tu presente, y tu futuro contigo decayó. También te enamoraste, quizá del hombre equivocado. De él nunca te arrepentiste, pero no es fácil llevar una vida a su lado. 

Has llorado. Mucho. Y has sufrido. Sí. 
Pero... Pero ya está. Se ha acabado. Levántate, ¡Sí, hazlo! Y mírate a ti misma. Mírate  al espejo. ¡Estás perfecta! Tienes dos brazos, dos piernas, dos ojos que ven el mundo... Eres preciosa. Ahora mira más allá de ti. Sí, está obvio que te han herido. Demasiado. 

Pero ya basta, ya es suficiente. ¡No! No quieres vivir así. ¡No! No quieres guardar esto en tu memoria. Y no. Aunque lo pienses constantemente, tampoco quieres realmente morir. Porque tienes muchos amigos, una familia y personas a las que agradecer que hoy sigues en la tierra. Y les quieres mucho. Acéptalo. 

Eres muy fuerte. Muy, muy fuerte. Más de lo que una persona normal debe ser. Y no es justo. Pero alguien me dijo una vez y hoy yo te lo digo a ti: 

"La vida no es justa; acostúmbrate." 

Y debes hacerlo. Si no, ¿Qué te queda? El camino a la felicidad no existe porque el sentimiento de ser eternamente feliz no lo ha encontrado nadie. Así que, límpiate esas lágrimas que caen de tus preciosas mejillas y enséñame tu sonrisa. Y ahora, date la vuelta. Sí. Toda esa gente a la que ves son tu familia. No importa que sean de sangre o no; allí estan los amigos del colegio, los amigos que hiciste en tu ciudad, tus mejores amigos, aquellos que hoy ya no están porque un día decidieron dejar de sufrir y descansar, tus profesores, tus entrenadores, tus padres, abuelos, tíos... Y toda esa gente que es feliz a tu lado o que murió siéndolo. ¿Los ves? Allí estan. Y créeme. Allí estarán. 

Si decides partir hacia otro mundo en el que descansar, ellos no podrán seguirte. Su lugar está en la tierra y su deber es quedarse aquí. ¿De veras deseas marchar? Piénsalo bien. 

Es cierto. Yo no estaré aquí siempre y si mañana debo irme, me alegrará recibir noticias de que una chica de allí abajo a la que yo un día llegué a conocer, ha cambiado el mundo. O verte desde lo más alto del cielo sonreír junto a ellos, y también llorar; no lo olvides. Porque llorar es humano. Y siempre se sonríe tras una buena depresión. 

Y recuerda, si un día ves un arco iris en lo más alto de la montaña brillando junto al sol, es porque tuvo que soportar la lluvia. Y aún así, él mismo es hermoso. Entonces, acuérdate de mis palabras y de mí. Acuérdate de todas aquellas personas que dieron espada y flor solamente por ti. Acuérdate. 

Comienza un nuevo año. Lleno de emociones y sentimientos. Espero que en él encuentres todas las respuestas que andas buscando. Pero solo haz una sola cosa. Cierra los ojos y deja de pensar en el mundo. Ahora, comienza a soñar. ¿Estás soñando? 

Entonces oirás mis abstractas e inexistentes voces que te susurran a tu frío oído y dicen: 

"Felices Navidades y Feliz 2016.
Con cariño: tu conciencia". 



miércoles, 23 de diciembre de 2015

Rima V

Prefiero morir tranquila y firme. 
Sin lluvias ni neblinas. 
Pero prefiero volar alto y libre, 
Y morir en grises y tinieblas. 

Rima IV

Con cuatro palabras, 
te escribo un poema. 
Con tres palabras, 
te escribo una poesía. 
Con dos palabras, 
tu amor me hace poeta
Con una palabra, 
susurro que ya eres mía.

Rima III

Si vivo, muero. 
Si muero, vivo. 
Entonces, amor mío, 
¿Estoy vivo o estoy muerto? 

Rima II

Aprendí a batir con alas de fuego, 
Distinguí vivir y no estar muerto,
Mi demonio invadió vuestro cielo. 
Y mi beso se quemó, como pájaro de hielo. 

lunes, 21 de diciembre de 2015

Rima I

Escritos están en papel mis sentimientos.
Y vuestro destino aguarda el linaje de mi destierro.  
Vos la tinta y el tintero, derramáis de eterno amor verdadero. 
Sin yo haberlo pensado, siquiera yo quererlo.
De vos depende, mi profundo yo sincero. 

sábado, 5 de diciembre de 2015

Estoy cansada

Estoy cansada. 

Estoy cansada de encerrarme 

en mi habitación; en mi sepultura. 

Donde no hay ventanas, 

ni llega un solo haz de luz. 


Estoy cansada.

De correr y correr...

Estoy cansada de correr contrarreloj, 

En una carrera que me impide respirar, me mata las piernas y hace al corazón; hace al corazón caer...


Caer rendido. 

Caer rendido otra vez. 


Y estoy cansada. 

De caer y levantar, y caer y levantar...

Porque yo levanto siempre. 

Y creen que soy fuerte, pero no lo soy.

Lo hago por lo que me queda ahora, 

y porque confío en ver de nuevo el sol.


Cansada. 

De seguir y seguir... 

Pero no quiero seguir.

Al menos, no así. 

Quiero correr, huir,    

Bien Cambiar, bien escapar. 

Y nunca y nunca; volver atrás.


Porque sí. Porque estoy cansada.

De llorar y llorar... 

Quiero tirarme al suelo, descansar;

De verdad. No volver a llorar. 

Llorar por alguien que se ríe de mí, 

y que nunca le he importado, nunca. Llorar por alguien que me hizo vivir,

Y me hizo ver la vida con otra mirada.

Ahora, el silencio es callado. 

Ahora el silencio me hace sufrir. 


Estoy cansada.

Sufrir, sufrir... 

De fingir, de fingir...

Y mentir y mentir. 

El límite entre dos inertes materias; 

la fortaleza y la debilidad.

Es tan frágil como una copa de cristal, 

Es tan minúsculo, como mi espacio

En este mundo. 

Y me he cansado. 


Me he cansado, 

De sonreír, de sonreír...

Lo sé. Sé que debo de aceptar. 

No hay otro camino.

Me he quedado sola

y en soledad mi aura quedará eterna. 

No hay otra opción.

Me ha tocado quedarme atrás.

Me ha tocado mis heridas esconder,

Decir amén a los demás.

Aguantar, escuchar, ver, callar y soportar   y nada no poder hacer. 


Me he cansado. 

De esperar y esperar... 

Esperar a nada. Tan solo esperar. 

Esperar a que vengan a buscarme 

y me entreguen lo que nunca antes 

nadie me dio.


Esperar a que alguien me devuelva 

lo que un día, otro cuerpo me quitó.  

Esperar a que la bonita vida que tú ves, 

me cierre las puertas y, 

no me haga volver. 


Cansada. Muy cansada. 


De respirar y respirar... 

Una y otra vez. 

De no poder ser persona. Estar sola. 

Quiero atravesar el espejo. 

Y que con dos plumíferas alas de angel, 

me hagan volar aterrizando así en algo, 

en algo inédito y nuevo. 


En un maravilloso cielo, 

en un extravagante mundo de hielo.

Libre de miedos, llantos y odios. 

Libre de materia inverosímil que a mí, 

me hace creer algo que jamás nunca vi. 


Pero tan solo queda esperar, 

Y esperar y esperar.. 

Algo ya no inusual.

Habitual. 

Esperar a que algún día me den lo que, 

por cada cumpleaños, nadie me regaló. 

Una vida, que en mí nunca nació.


Dejaré de estar cansada. 

Descansaré. 

Dejaré de derramar lágrimas. 

Reiré. 

Mi corazón parara y mi respiración, 

a pesar de ir dentrás de mí, 

Nunca, nunca, 

me alcanzará. 


Hoy mis fuerzas han perdido la batalla; 


Hoy mi alma, 

Está cansada. 





martes, 1 de diciembre de 2015

Aquella dama

Aquella dama presumida; 
elegante y hermosa.
Que dios en mayo creo 
y me la entregó envuelta,
engendrada en rosas blancas. 

Presume la muchacha,
de tener ojos claros
y alguna cana. 
Mas en mis ojos solo cabe 
ver la mirada de dos diamantes, 
tupido cabello de oro 
y gran sonrisa de perlas. 

¡Cómo explicar yo esto con palabras! 

Cada primavera,
cuando los campos de mayo florecen,
cuando los pájaros del firmamento me sonríen,
cuando el cielo me da sus frutos, tú. 
Tú me haces llorar sin caer lágrimas,
reír sin mover los labios. 
Amar y no ser enamorada.

Tú me haces ser persona.
Tú haces que líneas de palabras, 
sean aquellos versos de mi vida. 
Tú y nadie más. Tú me das la luz. 
Tú y solamente tú. 

Perdió su familia de niña. Se quedó sin nada. 
Se enamoró muy joven, 
de un hombre que hizo motor en su vida.
Vivió de sus manos 
y de sonreír no se ha olvidado. 

No huyó de su destino; 
jamás la oí quejarse de su infancia, 
pues no tuvo libertad. 
Sin embargo no erradicó su lealtad. 

Tan solo he de decir que los frutos
del árbol han vuelto a caer.
Y bajo la sombra, la flor florece 
en mitad de cualquier tormenta.  

Porque contigo no hay problemas, 
no hay cielo gris. 
Porque contigo no hay problemas, 
no he vuelto a sufrir. 
No hay una sola puerta cerrada.
Solo hay alegría, emociones, 

Y belleza. 

Porque tú eres el sol, 
que deshace la neblina. 
Tú eres mi alegría, 
Mi musicalidad para vivir 
la magia de la vida. 

Con todo esto, he de decir; 
Te quiero; eso ya lo sabías. 
Te amo; eso ya lo he dicho. 

Con todo esto, quiero decir; 
Eres la luz que ilumina mi camino 
Eres la piedra de oro, 
que en la vena del sufrimiento aparece, con cada movimiento. 

Eres mi mirada;
cuando mis ojos están ciegos. 
Eres el sonido del viento;
cuando no escucho palabra. 
Eres la mano que se ofrece;
cuando nadie más lo hace. 
El impulso que al corazón da
para seguir siendo fuerte una vez más. 

Aquella dama presumida;
elegante y hermosa. 
Que dios en mayo creo
y me la entregó envuelta, 
engendrada en alegría y felicidad eterna. 

"A mi abuela;
la única dama que iluminó mi camino cuando nadie más lo hizo. 
A mi abuela; 
la única dama que hizo de madre, de padre, tía, amiga y de mí misma." 

lunes, 23 de noviembre de 2015

In Love

Cada mañana despierto,
En mi habitación. En mi cama. 
Y entre sábanas blancas,
Ellas me arropan.
Mi mente es consciente,
Honesta, y sincera, y presente. 
Que cada mañana despierto,

Sola de nuevo. 

Quiero rozar tus labios con los míos. 
Que se toquen, que se sientan.
Que se quieran. 
Sentirme como nunca antes me he sentido. 
Alta. Terrestre. Divergente.  

Tan diferente. 

Quiero adoptar el calor de tu pecho, 
Notar el airado viento pasar;

El tiempo parar. 

Quiero cruzar tu mirada, 
Y no esconderla, bajarla, ocultarla.
Quiero cruzar tu mirada, 
Y que tus ojos me miren a mí, 
Y que tus ojos se cierren conmigo al dormir. 
Y que tus ojos, 

Sean la opción para ser feliz.

Se me quemará la respiración. 
Se me congelará el corazón.
Puede que jamás vuelva a salir el sol.
Sin embargo habrá algo dentro de mí que lata.

Y tú serás esa razón. 

Mientras tu persona se detenga delante de mí,
Mientras mi persona, tu mirándome, 
no sepa a dónde ir. 
Mientras la lira, cante embellecida al clavel, 
Y tu mirada, siga siendo de color miel; 

Mi alma guerrera, seguirá en pie.

Y mi atronadora esperanza, 
Se levantará inmune de la tierra 
para nadar intacta, 
en un caudaloso río de problemas. 

Mi pobre aura enamorada, 
Que jamás será recompensada. 
Tú jamás te fijarás en alguien como yo, 
En alguien que parece ignorarte 
Pero que por tu primavera, 

¡Yo daría hasta la muerte! 

Alguien que por pasar una vida contigo,
Su tesoro mas preciado, 
No dudaría en dar. 
Alguien que por un beso de amor verdadero, 
Cielo o mundo, estaría dispuesto a entregar.

Pero tú prométeme, no dejarme jamás. 

Pero tu sonrisa es motivo de otra.
Y ello no lo puedo evitar.
Seguiré luchando, batallando,
No servirá de nada. Soy consciente, 
Pero me he enamorado, es consecuente. 

Seguiré espiándote tras esa horrenda línea,

Que nos separa.

Seguiré queriéndote, aunque no lo hagas tú.
Seguiré locamente enamorada de alguien
Que en mi enflorecido campo de rosas,
Me muestre su marchita flor morada. 
Seguiré queriéndote, aunque no lo hagas tú. 
Aunque no sea a mí, 

A quien entregue su luz. 


domingo, 15 de noviembre de 2015

Soy Poeta

Yo admiro, callo y pienso. 
Por ello soy poeta. 
Soy capaz de apreciar mariposas, 
Donde vosotros veis negras rosas.

Por ello. Por ello soy poeta. 

Notaréis viento en vuestro gesto. 
En el mío hay aire, allegado de turbios mares.

Y por ello soy poeta.

Vienen solo cuando las necesito. 
Cuando muero; sea buen ejemplo. 

¡Golondrinas, Gorriones, Cuervos! 
¡Quién dijo que vivir no era tan bello! 

Por ello soy poeta. 

Perdí mi alma de mujer. 
Adopté la de un poeta. 
Pues en mis alrededores se encuentra, 
La máscara de la naturaleza. 

Por ello. Por ello soy poeta.

Y en nosotros está, el ejemplo de dos vidas.
La que añoramos y la que aún no ha llegado.

Por ello soy poeta.

Lo real es un engaño.
De vosotros, transeúntes...
Ignorantes del presente.  

Por ello soy poeta.

Propagaré mi poesía. 
A los sabios conocimientos de la vida.
Difundiré mis quehaceres,   
Para un día yo, del futuro aprendiere.

Y por ello, yo soy poeta. 

Mientras la rosa abra sus pétalos a los ojos del enamorado.
Mientras tu mirada de diamantes clave en mí, su hermosa luz.
Mientras quién escriba, sea el corazón 
y no la mal empleada palabra de tu voz. 
Mientras el pensamiento, dé claridad al sentimiento. 

Por ello. ¡Por ello soy poeta! 

Por ello soy yo poeta. 
Sabré por qué lo soy.
Y por qué compongo poemas.
Sabré por que he decidido, 
De la lírica haberme abastecido. 

Por ello soy poeta. 

Yo admiro, callo y pienso. 
Por ello soy poeta. 
Soy capaz de ver algo más que palabras escritas,
donde vosotros solo veis poesía.

Por ello soy poeta. 

Poeta de armas tomar, 
De poemas, de verso y prosa 
Romances, sonetos, cantares. 
Poeta. 

Y por ello yo, 
Soy poeta. 

                                         

sábado, 14 de noviembre de 2015

Viernes 13.

13 de Noviembre. Viernes 13. 
Siento decir que esta vez no se trata de ninguna película de terror. 

No. Esta vez, no es ficción. El número de la mala suerte ha surtido efecto en el mundo contemporáneo y real. 

Cada rincón. Cada carretera. Cada lugar. 
Todo es oscuridad. Incertidumbre y tristeza invaden las calles de parís. Las explosiones han dejado eco en la presencia de todo francés y cada alma derrama hoy lágrimas y gritos de dolor. Personalmente, ¿Debería ser así todo esto? Centenares de muertes y heridos. Inocentes ángeles que hoy, vuelan libres de dolor, emprendiendo un eterno viaje hacia un nuevo cielo. 

Todos ellos, testigos del sufrimiento de un país ensangrentado y abatido por hombres en el cual un viernes a las nueve de la noche, sembraron el terror en el corazón de Paris. 

Francia no sufría tanto desde la segunda guerra mundial. Hoy irrumpe este hecho con un nuevo atentado que sin duda, pasará a la historia. 13N. Una fecha que, como bien ha dicho su presidente hará ver al estado islámico una Francia mas unida y fuerte, como prometieron hacer hace ya años en todo momento. 

129 muertos. 252 heridos, 99 de ellos en estado crítico. Y las cifras, siguen subiendo. 

Unos se encontraban cenando en restaurantes. Otros en el partido de fútbol. Otros en el cine de la ciudad. Y muchos; desafortunados, en la sala de conciertos Bataclan que hoy, sábado, se ha trasformado en una auténtica y sangrienta carnicería. 

España esta conmovida. "El dolor de Francia, es el dolor de España" Quizá sea una buena manera para comenzar a reflexionar de que España no es el único país existente en la tierra. Pero, ¿Estaría España tan conmovida si se hubiera tratado de países como Iraq o Siria? No lo creo. 

Nuestro país ya está seguro. Ahora toca preocuparse por Francia, país vecino. Y por el mundo en general, ¿Vamos a dejar que centenares de personas mueran inocentes cada año? ¿Tan ignorantes somos de aceptarlo y mirar a otro lado? 

Es el momento de cambiar. Es el momento de ser alguien. De no esconderse a la súbita realidad. Abrir los ojos. Ver la realidad. 
Hoy en Francia solamente hay un silencio callado y negro. La ciudad del amor se ha convertido en la ciudad del sufrimiento y terror. Ha perdido a muchos de sus patriotas que ya yacen en sus correspondientes lechos y como sus respectivas familias saben, no volverán. 

Está pasando. Y pasará. Pero después de esta terrible noticia, ¿Seguiremos negando la mirada a la horrenda y mugrienta sociedad? 

Es tu decisión. Piensa. Luego actúa. 

#PrayForParis. 





jueves, 12 de noviembre de 2015

Tempus Fugit.

Estoy encarcelada. Cada día que paso, es un nuevo obstáculo que la vida me opone para seguir hacia adelante. Sé que soy más fuerte que los arrogantes seres humanos que me rodean. Pero también mi mente es consciente, de que soy menos feliz. 
Ya no río. No sonrío. 
Se me han acabado los motivos. 

Me di cuenta que mi aura se había apagado cuando la vida me castigaba de nuevo y ya no sentía nada. No lloraba, no sufría, no estaba dolorida. Todo era gris. Y gris se quedó. 
El silencio de una alma callada, 
En fracasos, agotamiento y cautela se transformó. 
Como agua caudal, que va hacia la mar,
A sufrir mi alma se acostumbró. 

Puede ser que en mí veas sonrisas. Puede ser. 
Puede que pienses que soy una mujer risueña.
No me ha de sorprender. 
Llena de alegrías, vacía de penas. Una mujer, que no tiene problemas. 
Pero, no es así. 

Y nunca lo ha sido. 
Nunca lo fue. 

¿Qué debo hacer? Morir es una tontería. Mas una cosa es desear. Otra es actuar. No debo hacerlo, no conseguiré nada. No le tengo miedo a la muerte, sino a las pocas personas que dejaré tras ella después de irme y no volver a verlas.  

Aquellas a las que un día conocí. De las que extravagantemente me enamoré. A las que he visto crecer y a las que lo han hecho en mí. Aquellas por las que luché día y noche, para no perder su amor. Aquellas personas. 
Aquellas pocas personas, que hacen mi vida madura y amena. Que hacen que cada tarde de amargura, no me ahorque ni me mate con una bala. 

Cada día comienza diferente. Pero en todos acabo igual. No he tenido suerte. Es verdad, nunca la tuve. 
Idealicé mi futuro y el destino me lo arrancó sin mas remordimiento. No me preguntó. Sencillamente, me lo arrebató.  

Puede que nadie se sienta como yo. Que me miren extraño o que se rían. Que me odien sin apenas conocerme. Pues hacerles caso no debo, porque ellos, ignorantes, se ciegan a lo evidente, tras yo haberme echado a llorar como una princesa, perdida en el presente.  

¿Qué debo hacer? 
¿Acaso alguien se siente como yo? 
Que venga, lo suplico. Lo pido. 
Que venga y no me deje sola. Necesito alguien que me entienda, que me lleve a su lado y me haga saber que no estoy tan sola como yo pienso. Derramemos lágrimas hasta no poder vernos. Derramemos nuestro pasado, en ríos caudales, para así perderlo y desafiar en turbios mares, las batallas que nos esperan allá. Allá a donde yo vaya.  

Tú espera. El sufrimiento no ha terminado, ni terminará. 

Así es la vida. Unos tienen suerte. 
Otros no tanta. 

Nada más que añadir. Lo que espera ahora, no es vivir. Ni el mero intento logrará conseguir que la vida, que el destino o que alguien que controle mi sufrimiento, me enseñe la otra cara de la moneda. Que me enseñe su bella y sincera primavera. 

¿Qué queda ahora? Solo llorar. 
Llorar hasta un día, no poder hacerlo más. Por culpa del corazón guerrero, que en putrefacta sangre él, vi verlo convertido. 

Así es la vida. No lo diré más. 
Unos quieren tener suerte. 
Otros mueren, en el intento de ser alguien.



domingo, 8 de noviembre de 2015

Diez inviernos.

Hace diez inviernos. 
No pude despedirte. Ni verte una última vez, 
sabiendo que ya jamás te volvería a ver. 

Hace diez inviernos. Diez. 
No sé hacía que dirección ir, 
Para buscarte. 
No sé hacía dónde marchaste.
A dónde fuiste, a dónde escapaste. 
Solo sé que hoy es demasiado tarde. 
Ya no puedo perseguirte.

Hace diez inviernos que, 
Cuando el negro de la noche decae,
ilusa, converso con la soledad. 
Cuando el viento se hace silencio, 
Y la luna se alza hermosa y luminosa 
Irrumpiendo aquellos oscuros mares. 
Cuando la golondrina vuelve,
el tiempo se va y ya nadie puede verme. 
Cuando a mi habitación ya nadie viene
y todos duermen. 
Cuando añoro, cuando recuerdo.
Es entonces cuando siento; 
Que te hecho de menos. 

Hace diez inviernos. Diez. 
¡Vuelve! Yo sola no puedo afrontar esto.
Necesito amor. Te necesito a mi lado.
Ver tu mirada. Una vez. Una vez más. 
Robemos el tiempo al tiempo
Y juntémonos como antaño prometimos. 

Hace diez inviernos. Diez fríos inviernos. 
Dime que te acuerdas.
Que no me has olvidado. 
Dime que puedes respirar.
Que no te sientes ahogado. 

Si me hubieras avisado,
Si no me hubieras dejado. 
Si me hubieras dicho algo, 
Si no me lo hubieras ocultado. 

Dios sabe si quizá hoy, 
Sería feliz. 

No importan las murallas, 
Ni lo difícil que sea la batalla. 
Si he de morir; lo haré. 
Si he de sufrir; sufriré.

Si temprano, si pronto, si no llego a tiempo. 
Me es indiferente. 
Nunca es tarde si el héroe, 
no se siente cobarde. 

Hace diez inviernos. 
Tú. 
Aparece en mi vida,
En vez de en mis pesadillas. 
Aparece delante de mí, 
En vez de aparecer cada vez que lloro, 
junto al amargo recuerdo rutinal. 

Hace diez inviernos que ella te llevó. Diez. 
Diez inviernos llevo. 
Diez sin estar contigo. 
Pidiendo por navidades el mismo deseo. 
Cada año. 
Apagando velas y crecer sin verlo cumplido
Cada invierno. 
Seguiré esperándote
No lo dudes. 
Seguiré soñándote, 
Y llorando con el dolor, siempre presente. 

Diez inviernos llevo.
Diez sin estar contigo. 
Mirando la misma fotografía. 
Sin entender porque la muerte te adoptó 
Y te llevo con ella. 

Diez inviernos. Diez. 
Diez inviernos de sufrimiento, 
De sequedad, orfandad, corazón hundido, 
Y abandonado. 

Te fuiste. ¿Para qué? Para no volver.
Me dejaste. ¿Por qué? No lo sé. 
Quizá huiste de tu vida. 
Egoísta... cobarde... 
Eres como yo. 
No somos fuertes. 
Nos unió el destino. 
Y él mismo nos separó.  

Este invierno, no volverás.
Mi deber es superar y Aceptar. 
Me dejarás. Sí. 
No vendrás. 
Debo hacerlo. 
Debo Olvidar. 

Pero mi corazón, 
(Si es así como puedo aún llamarlo yo)
No puede apagar la llama, 
Que encendiste un día 
Y mi mente es
incapaz de imaginar un mundo sin tu sonrisa. 

Hoy hace frío. Todo es gris. 
Hoy no estás. Ni lo estarás. 
Mañana saldrá el sol. Será todo mejor. 
Dame la mano.
Y Volemos a la tierra de Peter Pan. 

¡Volemos!
Donde los sueños se cumplen, 
¡Volemos!
Donde los problemas no existen. 
¡Volemos!
Donde estemos los dos. 
Donde padre e hija, 
Se encuentren donde un día, 
La muerte separó. 
Volemos, 
Donde a un padre y a una hija, 
Hace diez años, un invierno separó. 




 













miércoles, 28 de octubre de 2015

Ha llegado el momento.

¡Qué fácil sería! 
A pocos centímetros de mi piel está la salvación de esta asquerosa vida. 
Tener el valor de empujar mi mano hacia mi corazón, atrevesando mi ropa y cuerpo desnudo acabando así con todo. 

Con todo. 

Sería tan fácil... 
Volvería a encontrarme con aquellos a los que un día perdí. Ellos, a los que tuve que despedir con un ahogado y lagrimoso adiós. A otros en cambio, no tuve la oportunidad de hacerlo. 

Solo unos centímetros. Mis últimos minutos de dolor y terminaré para siempre. ¿Y por qué no? ¿Acaso la muerte será peor que todo esto? No lo creo. Imagino que nadie notará mi ausencia. Puesto que siendo yo la molestia central de sus vidas, me lo agradecerán.

Opto por el camino fácil y huyo de las dificultades. Soy cobarde, egoísta. 

¿Fuerte? No quiero serlo más. Lo fui una vez y no valió la pena. O quizá: ¿Lo llegué a ser? No. Nunca lo he sido. 
Quien abandona este mundo es aquel que teme a la propia vida. Y yo, la temo. 

Las lágrimas de mis ojos llegan a mis mejillas. Caen simulando una tormenta y aterrizan en las sangrientas heridas. Duele. Escuece. Pero yo aguanto. 

Se acabó. Mi mano va quedándose helada y la sangre comienza a secarse. Comienzo a ver luz en mi camino y a experimentar aquella sensación de ser feliz. Sonrío por primera vez en quince años de tortura y sufrimiento. 

El color negro cubre mis ojos y oprime la vista a mi habitación, aunque yo tan solo veo iluminación. No consigo respirar y me voy consumiendo como una vela. Estoy fría. ¡Es el mejor sentimiento que he sentido jamás! 

Y después de tanto tiempo aquí llega ella; tan elegante y seria como aparecía en la penumbra de las noches y en mis dulces sueños. ¡Qué hermosa es! Acepto su mano y me marcho junto a ella. Todo a terminado. 

Estoy impaciente por comenzar a vivir. 


martes, 27 de octubre de 2015

Black.

"Black."

Oímos esta palabra y automáticamente nos coacciona a concebir hechos en negativo. ¿Por qué ocurre esto? 

Una persona negra nos concede más temor que una de nuestra propia raza. O partiendo de otra base, atribuimos al color oscuro a lo pésimo mientras que el pigmento claro debe ser óptimo para los humanos en la mayoría de los casos.
 
Personalmente, opino que estamos equivocados. 

Cuando nos sentimos ninguneados en un lugar vacante decimos que estamos en un agujero negro, en un temerario de emociones... En el vacío. 
Ahora bien: ¿No es el vacío algo inexistente, producto de nuestra absurda imaginación? En este caso, el vacío debería carecer de todo adjetivo así que no sería correcto etiquetar con un color a tal hecho. 

La noche. La muerte. 
Más oscuridad. 

El día. La vida. 
Luz. 

Nuestro deber tendría que ser reflexionar sobre esto último: ¿Acaso la vida va a ser eterna? 

No. De hecho, finalizará de un momento a otro. 

Pero la muerte... La muerte es celestial y eterna, puesto que nada ni nadie puede detenerla. Y la muerte como quién sabe,  es negra y oscura. Tranquila incluso. 

Durante la luz del día nos ocurre de todo, desde buenos momentos hasta malos. Pero, ¿Qué sucede durante la negra noche? 

Todos descansamos, dormimos, soñamos... 

Personalemente, deberíamos quebrar todas y cada una de las "etiquetas" que implantamos sobre las cuestiones de la vida. Pues la mitad, son erróneas y altamente inalcanzables. 

De todos modos, es una simple tontería.  

¿Quién se pararía a discurrir en el simple hecho de un absurdo y postergado color? 

Nadie. 




lunes, 19 de octubre de 2015

Mi hábitat natural.

Me asombra ver tanta gente pasándolo estupendamente en las fiestas de su barrio ¡Son tan felices! Yo los observo detenidamente desde el alféizar de mi ventana. Tras haberlo pensado varias veces al cabo de mi vida, he concurrido que verdaderamente, los envidio.
 
Tienen una gran capacidad social que me deja atónita. Llegan a sus casas con un buen recuerdo de la noche y si hay algo que les incomoda o no es de su agrado, acuden a su amigo infalible; El Alcohol. Pues no hay mejor compañía que te ayude a olvidar sea lo que sea. 

Yo no bebo. Tampoco pienso hacerlo. Sin embargo, debo reconocer que guardo bajo la manga alguna droga mucho más fuerte y adictiva que cualquier inútil botella o cancerígeno cigarrillo; La lectura. 

Prefiero leer una novela de Shakespeare, antes que obligar a mis ojos a leer revistas que tan solo nos aborrecen el cerebro. Me decanto más por un verso de Allan Poe antes que optar por las prosas de escritores tardíos que narran relatos cuyas historias no tienen ni pies ni cabeza. Me inclino a pasar noches sin dormir, alimentando a mi saciado estómago a base de cafeína y quemando mis párpados para ganar al cansancio por un examen importante, que decaer sobre mi cama tras un festejo en el que bebí alcohol y que por supuesto, no logro recordar que fue lo que ocurrió a continuación. 

No hace falta que lo dudes. Yo lo acepto. Sí, quizá sea una de esas criaturas extrañas cuyo hábitat natural son las pequeñas bibliotecas públicas en las que vagar moribunda. 

¿Extraño verdad? 

Pero soy así. 
Soy de ese tipo de personas. 
De ese grupo pequeño que desea impacientemente entrar a una, para encontrar desde novelas en las que hidalgos dementes cabalgan buscando un sin fin de aventuras, hasta romances imposibles que solo la muerte podrá unir. Caminar entre enormes y completas estanterías u oler ese aroma especial al pasar las páginas que no muchos conocen... 

¿No es alucinante? 

Es triste que hoy en día la lectura haya pasado a ser un cargo o una obligación para todo el público, especialmente para jóvenes y/o adolescentes. Una verdadera pena. 

He pasado vergüenza durante muchos años, avergonzándome de mí misma. Pero finalmente he reconocido que quizá no sea de mi necesidad envidiar a esos mendrugos tarados que abniegan su vida con botellas letales. ¿Qué tendrá de malo la lectura? Nada. Está claro. Amar un libro es el romance mas bonito que puedas encontrar en una historia de enamorados. Y ser la princesa de papel de esa historia, no tiene comparación. Definitivamente, es precioso. 






domingo, 18 de octubre de 2015

Y colorín colorado, esta historia ha terminado.

Ha llegado el momento. 
Debo aprender a decir "no".
Deshelar mis eternos sentimientos. 
Quizá mañana la que no llore sea yo. 

Sabes que eres el acento, 
De cada poema que yo te leo. 
Sabes que eres el receptor, 
De cada historia que cuento de amor. 
Tu nombre se lee entre verso y verso.
Aún así, se me prohibe decir adiós. 
Ya no existe amor entre el centeno. 
Enséñame, a olvidar tu corazón.

El caos reina mi alma, 
Mi cielo está vacío. 
Ojalá pudiéramos arreglar, 
Lo que hemos destruido. 
Puesto que eso no era amor, 
Jamás nos unió Cupido. 

Cuitado me encontraba.
Ufano tu cuerpo estaba. 
Sé que te vas. 
Mas me quieres arruinar. 
Mis ojos ven que piensas irte.
Y yo más, no puedo perseguirte. 

Sé feliz con él.
Que os vaya a los dos muy bien. 
Nos veremos cuando el destino, 
Desee volver a unirnos. 


lunes, 12 de octubre de 2015

La vida no es justa; Acostúmbrate.

Sí, ¡Vayamos a Marte! 
¡Viajemos millones de Kilómetros de la tierra para saber si en algún otro punto del universo hay vida inteligente!

Hace años que miles de niños Africanos mueren anualmente tan solo por el hecho de NO TENER COMIDA. ¿Y el Ébola? Tuvimos que soportar ver repentinas muertes desdichadas e insoportables hasta que la enfermedad apareció en países ricos como Estados Unidos o España. En ese momento nos horrorizamos y comenzamos a discurrir soluciones para detener el problema en nuestro país. 

Mantener la calma. Hoy en día, existe cura para el temido Ébola. 

¿Cuánto dinero habremos gastado en saber si en Marte, hay vida? Personalmente, opino que quizá debamos cuidar mejor a nuestro planeta que a uno del que no vayamos a sacar nada de provecho. Sí, habrá vida. ¿Y qué? Para entonces, África estará deshabitada o Siria se encontrará en ruinas. 

Ojalá tanto la ciencia como la tecnología encuentren lo que tratan por todos los medios de buscar y que las susodichas avancen y nos lleven a un mundo mejor. Pero para ello tendrán que abrir bien los ojos y encontrarse frente a frente con todo esto. Empezando, eso sí; por arreglar el mundo, no huir de él. 

Sinceramente, haya o no vida en Marte, no lo niego. Pero viendo todo lo que en la tierra ocurre y observando como la gente se lava las manos como solución, opino sin remordimientos que la pregunta debería ser: 

"¿ACASO EXISTE VIDA INTELIGENTE EN LA TIERRA?"

Año 2015. 
La vida ni es justa ni es bella. 
Acostúmbrate. 





  


 

lunes, 5 de octubre de 2015

Mi sueño de Otoño.

Tengo un sueño por cumplir 
Sé que no es fácil de conseguir.
He de decir que por fin,
Hoy no me voy a rendir. 

No deseo ser amada, 
Por personas que me culpan. 
Ni conseguir una fortuna,
Para solamente saciar
Mi paupérrimo mar. 

No aceptaré los tres deseos, 
De la lampara del genio.
Mas no los necesito, 
Mi felicidad depende de mí mismo. 

No es más fuerte el que más problemas tenga.
Ni débil el que ningún obstáculo supera.
Sino aquel que no se rinde, 
Y sabe afrontar las situaciones. 

Hoy soy feliz. 
No me importa lo que piensen de mí.
Un día nací 
Y hoy descubro, por qué estoy aquí. 




sábado, 3 de octubre de 2015

La herida.

A veces, pensamos estar escondiéndonos de alguien que nos aterra o nos perturba. Pero en realidad, nos cubrimos la vista cegándonos así de la propia vida y oprimiendo el pensamiento hacia el futuro. No deberíamos dejar que ocurriese tal hecho, pero la vida es así. Aterradora. Y tan solo la gente que le tiene pánico decide huir de ella en vez de enfrentarse ante ella. Pero llega el momento en el que los demonios que llevamos cada uno dentro piden a gritos un infierno más grande y en dónde estar satisfechos. 

Nadie debería desear estar muerto. Pero quizá aquellas personas que lo desean no quieren morir, sino comprobar si realmente estan vivas. Es triste tener que saltar de un edificio, ahogarte en un río o hacer a tus venas amigas de una cuchilla para saber cuántas personas te quieren de verdad. Entristece acabar en una caja de madera para recibir el ramo de rosas que nunca te dieron. Desagrada ver que ninguno de ellos te dio un abrazo ayer y hoy nadie quiere soltarte, porque no volveran a verte. 

Pensamos que lo peor que nos puede llegar a ocurrir es morir, pero esto no es así. La mayor pérdida del ser humano es saber que algo muere dentro de nosotros mismos estando aún vivos.  

Pero así es la vida. 
A veces eres el cuchillo.
Otras, La herida. 


jueves, 1 de octubre de 2015

Your Lovely End.

Hay una luz que ilumina mi camino.
Veo oscuridad que oprime el pensamiento. 
No sé como será tu corazón abierto, 
Ni cuánto de grande será tu sufrimiento. 

No me dejes en soledad. 
Te necesito a mi lado. 
Porque el daño que me hago, 
Es solo por tu forma de pensar, 
Por tus intentos de no vivir, 
Y tus ganas de morir. 

Seas como seas, 
Me quieras o no me quieras,
A Dios le rezo noche y día, 
Pues con mi alma no podría

Rezo a quién conmigo había estado, 
Desde hace quince años. 
A quien toda la vida he amado
Y sus errores y virtudes, he heredado.
 



miércoles, 30 de septiembre de 2015

Mi muerte rutinaria.

¿Vivir? 
¿Para qué? ¿Por qué? ¿Para quién? 
Si las personas que me odian me lo dicen y las personas que respeto no se atreven a decírmelo. Diría que me da pena irme de aquí porque amo a las personas que me aman. Pero serían excusas. No hay amor que supere a cualquier depresión. 
¿La muerte? 
¿Acaso no es esto una prueba inicial para superarla? Porque ya no puedo más y si hay algo peor, prefiero no saberlo. 

Si no me quieres, dilo. 
Si me odias, grítalo. 
Si quieres que me vaya, ábreme la puerta. 
Pero no me ocultes nada más y no me digas que me amas tanto como amas a los demás. 
Ya me he rendido. Tú no vas a cambiar.
¿Seguir intentándolo? Me da miedo volver a empezar. Cada día que pasa es un infierno en mi interior y cada día que trascurre acaba peor que el anterior. 
No. Ya basta. No quiero sufrir. Es demasiado cargante y conlleva hechos irrevelantes. 

Si esto me sirve para hacerme fuerte, que acabe ya. No lo quiero ser más. Quiero huir, ser cobarde, correr como una niña pequeña, gritar y que nadie oiga mis sollozos al llorar. No preocuparme de hechos que no me incumben y comenzar a sonreír cuando no hay motivos, dejando las lagrimas para otro momento. Pero es imposible; no lo logro. Quizá otro día, cuando no me sienta tan sola.

Esto me supera, me agobia, me ataca. Que mi fuerza de voluntad muera y me deje este mundo en paz. Sinceramente; No puedo más. 




No te vayas todavía.

Quién me dijo algún día,
Que así ibas a acabar. 
Agradezco a quién me decía, 
Que todo iba a ir mal. 

Las aceras están mojadas,
Me alejo de las miradas. 
La civilización que me espera. 
La civilización que me abraza. 

No pensé que te irías, 
Siquiera que me cambiarías. 
¿Me ha sustituido él? 
Verdaderamente, no lo sé. 

No lo supe valorar. 
Hasta que un día, 
Marchó nuetra calandria 
Y no volvió a cantar.
No volví a oírla jamás.

Quién predijo este hecho,
Que ibas a volar. 
Que en mi jardín de helechos, 
No te ibas a quedar. 

Las azules aguas,
Que huyen de mi mar. 
Las cumbres blancas, 
Que se hielan en ardor, 
Que se funden en un horrendo amor. 

Déjame buscarte. 
Déjame encontrarte. 
Deja que yo te sueñe, 
Y que nada más nos atormente. 

Busco la paz en tu gesto. 
No me rendiré. 
No busco ser guerrero. 
Ni tampoco lo seré. 
Graba en tu recuerdo, 
Yo jamás te olvidaré. 

No busco la felicidad, 
Ya no es de mi necesidad. 
De ti depende mi paz, 
De ti depende estar o no mal. 

Porque sí estoy mal.
Oprimida, ninguneada... 
Porque no sé ni dónde estoy,
Ni si quiero seguir viviendo hoy. 

Tendré amigos y personas que
Me querrán hoy más que ayer. 
Pero solo veo una oscura luz.
Hoy solo me faltas tú. 





La tranquilidad.

Exhausta por entar a aquel lugar. 
Nerviosa por saber cómo era en realidad. 
No podía esperar más, 
Mi alma ya deseaba entrar. 

Todas las equivocaciones que cometí, 
Todas las veces que me caí.  
No me sirvieron para nada.
Solo para ocultar, la oscuridad cegada. 
Solo para ocultar las sombras, 
Que me atacaban noche y día. 
Para ver caer luz que no existía,  
Y desvelar el sueño que tanto perseguía. 
Para callar las tantas bocas,  
Cuyos labios nunca dijeron verdad. 
Y sus voces calladas no volvieron a hablar. 

Pero por fin atravesé el portón, 
Y pregunté si era o no 
lo que buscaba yo. 
"¿Es aquí la tranquilidad?"
El hombre me miró
Y me respondió con amabilidad: 
"En lo cierto estás, 
Y si entras, a sufrir no volveras jamás". 



lunes, 28 de septiembre de 2015

Pinocchio.

Tristes.
Presionados. 
Manipulados. 
Quizá no exista un solo adjetivo para describir como a veces tanto hombres como mujeres nos llegamos a sentir. 
Nos encontramos encerrados e incomprendidos. Esclavizados por cuerdas e hilos que no nos dejan ser libres y hacer lo que a nosotros nos gustaría hacer. 

Nos sentimos aislados del mundo, observando como personas que desconocen quienes somos se burlan de nuestro gracioso rostro de muñeco abandonado. Desconocen nuestra verdadera identidad, nuestro pasado, nuestra vida y aun así disfrutan viendo como un singular hilo tira de nosotros hasta hacernos sufrir. 

No importa cuantas veces te rompan en tu interior, porque ellos no lo ven. Nadie lo ve. Pero cuando algo en ti es destrozado y comienza a ser visible para los demás, haciendo imposible tu labor cotidiano e imposibilitando las risas que ya empezaban a ser rutinarias te das cuenta que has acabado. Ya no eres útil para nadie, te tiran o te dejan abandonado en una esquina en donde aseguran que no molestas ni que nadie tropezará contigo cuando ignoren tu presencia y adoren tu inexistencia. Te arrojan a un contenedor oscuro en el que solamente hay basura y restos, tales como en los que te acabas de convertir y ya lo eres para los demás. Los restos que nadie quiere. 

Pero realmente acabas de ser liberado y 
jamás nadie volverá a mover una sola articulación tuya sin tu previo permiso. Te descubres a ti mismo y te das cuenta que ese eres tú. Destrozado, abandonado y acabado, pero tú. Evadido de manipulaciones y cuerdas cuales siempre te habían ahogado y oprimido tu total libertad y que siempre, conseguían forzosamente que sonrieras cuando solamente querías escapar de aquel terrible lugar. 

Estás tirado e inmovilizado y es demasiado tarde para escapar. Quisiste encontrar la libertad para ser feliz pero, fue tarde cuando la verdad llamó a tu puerta y viste que jamás probaste a buscarla. Aceptaste lo que la vida te dió y no viste tras tus ojos, tal solución. 




domingo, 20 de septiembre de 2015

Je t'aime.

El viento rozaba mi cara, solo se escuchaba el dulce sonido de las verdes hojas al chocar. Yo estaba sentada en lo más alto de la cima del monte San Cristóbal, respiré profundo y note la naturaleza en mis manos. En ese momento cerré los ojos para sentirla más cercana. Alguien poco más alto que yo se acercó sentándose a mi izquierda. Entonces abrí los ojos; Era él. 

Era Viernes por la tarde y mientras él me envolvía suavemente con sus brazos, yo me apoyaba en su hombro. El cielo era precioso y el rojizo sol que poco a poco se escondía, lo embellecía tanto como lo hace una mariposa a su flor. 

Empecé a observar las farolas encenderse, comencé a ver aparecer la luna y las ventanas se encendían a medida que se acercaba la negra noche. El atardecer nos cubriría dentro de unos minutos y mientras el sol caía para volver a la mañana siguiente a levantarse, miré a los ojos a aquella persona tan importante para mí. Entonces, se acercó a mi oído pudiendo notar su respiración y susurrando bajito, me dijo: "Te quiero."

Me giré para devolverle el halago. Pero ya no estaba ahí. ¿Dónde estaba? ¿Se habría ido? Me dolió que me hubiese abandonado, pero ya no estaba conmigo y no sabía dónde se encontraba. 

Entonces sentí con la cabeza y pensé con el corazón. Realmente, nunca dejó de estar conmigo. Como el sol, que vaya a donde vaya nunca dejaré de verlo aunque esté a millones de kilometros de mí. Como mis dos castaños ojos, que lloran juntos y se mueven juntos, pero jamás podrán verse. 

Comprendí entonces que mi padre no se había ido, que siempre estaría a mi lado y que pasara lo que pasara, su alma siempre me acompañaría. 
Siempre. 


miércoles, 16 de septiembre de 2015

Diario de una enamorada.

Llevo tan sólo un par de días, 
Pensando en tu mirada.
Observando tu sonrisa, 
Esperándote cuando me faltas. 

No sé como me conquistas, 
Cuando me dices "Te amo" 
No sé si te marcharás de mi vida, 
O si he escogido el camino equivocado.

Pero al final, te has fijado.
Y has dado el primer paso. 
Yo que he estado meses a oscuras, 
Guardándomelo todo en mi sepultura. 

El verano se va acabando, 
El otoño esta llegando. 
Pero en nuestros corazones queda, 
El dulce aroma de la flor recién abierta. 

Hoy por fin, empezamos de cero. 
Sin importar el pasado y el sufrimiento.
Empezamos sin remordimientos, 
Y sin tener a personas de por medio. 

Hacia delante caminaré, 
Y hacia arriba miraré. 
Sé que me he enamorado.
Y Cupido su flecha, por fin, ha acertado.